en la proximidad




No cesa. En el arco perpetuo que describe su plenitud está próxima. Es un buen signo. Ejemplo para los caminantes que buscan. Dispuesta en días fríos, sosegadora en los cálidos. No hay elemento del suelo que no invoque su acontecer cambiante. Acaso en lo más alejado de las simas, los seres que pueblan charcos y costras de la caliza no sepan de ella. Y, sin embargo, acaso la luna vele también por su silencio. Instalada en el lenguaje simbólico de los hombres, es piel y es alma. Ella llega. Tú te acercas.